Hace tres o cuatro años me encontré por primera vez con la dificultad que supone utilizar en un ordenador PC cualquier vídeo que hubiese sido capturado con Final Cut Pro en un ordenador Apple. A simple vista no cabría suponer ningún tipo de incompatibilidad entre los dos sistemas PC/Macintosh ya que en el fondo estamos tratando con un stream de video mpeg2.
El problema de dicha conversión reside en una restricción impuesta por la empresa de la manzana que básicamente consiste en “envolver” con quicktime ese stream mpeg2 que contiene cualquier vídeo HDV registrado por una cámara compatible con ese formato.Y ese contenedor quicktime solo se puede utilizar de vuelta con una máquina de Apple y más concretamente con una que tenga a su vez instalado Final Cut Pro.